LA CAFEINA ENGENDRA MONSTRUOS
Hacia por lo menos cuatro años que no probaba la Coca cola, la cosa empezó medio en broma, ya me entienden, para hacer boicot a los productos norteamericanos y la broma se fue extendiendo en el tiempo. La verdad es que no me costó por que la bebida en cuestión tampoco es que me apasione pero después de convivir con cuatro latas de Coca Cola en la nevera desde finales del año pasado cuando M.A. y N. decidieron que no les apetecía, tuve la fantástica idea de probar una, el motivo no era gratuito, lo que yo intentaba era no sucumbir al sueño y aguantar hasta las dos y pico de la madrugada para poder ver "La semilla del diablo" que se proyectaba a aquellas intempestivas horas por televisión. Abrí la primera lata y después de reencontrarme con aquel sabor familiar empecé a comprobar los efectos de la cafeína, iba por el buen camino, el sueño que me lastraba al sofá empezaba a desaparecer, así que no contento con los efectos de la primera lata, decidí abrir una segunda y fue entonces cuando los ojos me quedaron abiertos como platos, ya podía aguantar hasta las dos o las seis de la madrugada si hacia falta, el sueño esta vez no podría con migo y yo me preparaba para disfrutar con los fotogramas de Polanski. Mientras esperaba la película, me dedicaba a trastear con el ordenador y a perder el tiempo con demás temas vacuos. Me senté en el sofá para comprobar el si se decidían a proyectar el film y me di de bruces con todo el concilio de curas que habían llegado de todas partes del mundo para asistir a los funerales del Papa y posteriormente elegir al que seria su sucesor, y eso si que me dio miedo, allí estaban ellos luciendo sus kilos de más, nunca había visto tanta testosterona junta, todo eran hombres, ninguna mujer estaba presente para escoger a quien, según dicen ellos, sería el representante de la Iglesia para toda la humanidad, tanto hombres como mujeres, la igualdad entre sexos no existe en la Iglesia, allí el macho elige, parte y reparte mientras que la mujer se resigna a ser una mera espectadora. ¿Tan difícil sería que aprendieran algo al respecto de la teología de la liberación? ¿Por qué nadie pensará en escoger pontífice a Casaldaliga? Por que al poder le molesta el pueblo. Después de todas aquellas visiones infernales, decidí no subministrarme más raciones de miedo y decidí marchar a la cama sin ver "La semilla del diablo" ¿o quizás aquellas imágenes tenían algo que ver con la película de Polanski?.Para decorar el post de hoy, les dejo una imagen perteneciente a un cuadro pintado por Botero presentado estos días en el que denuncia las torturas perpetradas en la prisión de Abu Ghraib. Y es que cuando un artista se moja, merece la pena prestarle un poquito de atención.
3 comentarios
R. -
ernesto lertora -
Sapporo -
Salud y republiquen